El presidente de la Federación Peruana de Fútbol (FPF), Agustín Lozano, ha vuelto a ser el centro de atención tras las polémicas que envuelven a la institución, incluyendo su vinculación con el caso ‘Los Galácticos’. En medio de este clima de críticas, Lozano, quien fue liberado el pasado martes tras ser detenido de manera preliminar, ofreció declaraciones al regresar al país luego de asistir a la final de la Copa Sudamericana y participar en el 79° Congreso Ordinario de la Conmebol en Paraguay.
Lozano defiende la estabilidad económica de la FPF
Durante su retorno, Lozano no tardó en defender la situación financiera de la Federación Peruana de Fútbol, que ha sido objeto de acusaciones en los últimos días. “Nos acusan de no tener dinero, de estar quebrados. Quiero dejar claro que la FPF es la más consistente económicamente. Es la más estable y tiene un gran potencial porque realiza grandes inversiones en infraestructuras que otros querrían tener y no pueden”, señaló el presidente de la FPF en declaraciones para América Deportes y Best Cable.
Aclaró, además, las razones por las cuales se han presentado ciertos retrasos en pagos como el de las Compensaciones por Tiempo de Servicio (CTS) y otros gastos. “En ese periodo, las personas con facultades para hacer esos pagos no pudieron hacerlo porque estuvieron privados de su libertad. Ahora, todo se está regularizando y la FPF de hoy es ordenada, con una administración financiera y económica que otros quisieran, aunque no lo reconozcan”, explicó.
La crítica a la gestión deportiva y la Selección Peruana
En cuanto al rendimiento de la Selección Peruana, que actualmente ocupa el último lugar en las Eliminatorias al Mundial, Lozano prefirió no emitir juicio. “Yo no opino sobre eso. Para eso tenemos un director deportivo”, comentó. Sin embargo, dejó claro su mensaje sobre la importancia de invertir en el desarrollo de categorías menores: “Si queremos evitar seguir quejándonos de los resultados, debemos invertir en los menores. Es algo que siempre recomendé, pero no se hizo caso en su momento”, afirmó.
A pesar de las críticas por el rendimiento actual, Lozano destacó los avances que se están realizando en la formación de jugadores jóvenes, recordando que desde hace dos años se viene trabajando en este sector. “Hoy que comenzamos con este trabajo, muchos comunicadores no dijeron nada. Y ahora que ya estamos invirtiendo en menores, nos exigen resultados inmediatos. Como presidente, siempre voy a dar la cara”, agregó.
La pérdida de la sede del Sudamericano Sub-20 y el rol del Gobierno
Uno de los temas más sensibles fue la pérdida de la sede del Campeonato Sudamericano Sub-20 de 2025, que finalmente se realizará en Venezuela en lugar de Perú. Lozano fue claro al señalar que la responsabilidad de este revés recaía en el Instituto Peruano del Deporte (IPD), quien no cumplió con los compromisos necesarios para la organización del evento, particularmente con la entrega de los estadios en Arequipa. “Es un compromiso que asumió el Gobierno, y nuevamente falló. No es la primera vez que ocurre”, afirmó.
El futuro de Lozano en medio de investigaciones judiciales
A pesar de las defensas que ha presentado Lozano, su situación legal sigue siendo incierta. El presidente de la FPF está siendo investigado por presuntos delitos relacionados con la organización criminal ‘Los Galácticos’. La Fiscalía Supraprovincial Especializada contra la Criminalidad Organizada solicitó 36 meses de prisión preventiva para él y otros implicados en el caso, incluyendo a otros directivos de la FPF.
La investigación, que involucra delitos de corrupción, lavado de activos y fraude en la gestión pública, continúa su curso. Si se confirma su culpabilidad, Lozano podría enfrentarse a penas de hasta 20 años de prisión, según explicó Jorge Chávez Cotrina, coordinador de la Fiscalía. El proceso judicial está en su fase inicial, y se espera que una audiencia programada para el 10 de diciembre determine las medidas definitivas en su contra.
La incertidumbre en el fútbol peruano
El futuro de Agustín Lozano y la FPF sigue siendo incierto, mientras las investigaciones avanzan. La situación deja al fútbol peruano en un punto crítico, con la reputación de la Federación en juego y con la necesidad de demostrar que puede superar los escándalos de corrupción para restaurar la confianza de los hinchas y las autoridades. El desenlace de este caso podría tener repercusiones significativas no solo en la gestión de la FPF, sino también en el futuro inmediato del fútbol en el Perú.