El fútbol peruano continúa sumido en una profunda crisis tras la detención de varios altos funcionarios, mientras la Junta Directiva de la Federación Peruana de Fútbol (FPF) se ve sacudida por nuevas renuncias y desacuerdos sobre una posible intervención de la FIFA.
El fútbol peruano vive uno de los momentos más oscuros de su historia. A pesar de que el 19 de noviembre se revocó la prisión preliminar de varios de los involucrados en el escándalo conocido como “Los Galácticos”, la situación en la Federación Peruana de Fútbol (FPF) sigue siendo crítica. El presidente de la FPF, Agustín Lozano, y otros directivos como Gisella Mandriotti, Genaro Miñán Armanza, Sabrina Martin Zamalloa y José Isla Montaño fueron liberados, pero las investigaciones por presuntos delitos como organización criminal, fraude y lavado de activos continúan su curso. Además, el próximo 10 de diciembre se llevará a cabo una audiencia clave que definirá la posible prisión preventiva de los implicados.
El reciente directorio y la polarización interna
El pasado 25 de noviembre, se celebró un nuevo directorio en la FPF que dejó claros los desacuerdos internos. Entre los puntos más relevantes de la reunión se discutieron la revisión de los contratos de los derechos televisivos con la empresa 1190 Sports, la posible salida de Lozano como presidente y el pedido a la FIFA para instaurar una Comisión Normalizadora. Sin embargo, los resultados fueron sorpresivos: la mayoría de los miembros de la Junta votaron en contra de la intervención de la FIFA y de la salida de Lozano, dejando el futuro del fútbol peruano en un limbo aún mayor.
El directorio, que en la actualidad está compuesto por nueve miembros, vio cómo se materializaron varias renuncias, incluida la de Gisella Mandriotti el 24 de noviembre. A ella se sumó la dimisión de Juan Enrique Dupuy, representante de la SAFAP (Sindicato de Futbolistas del Perú), quien manifestó su descontento con la falta de un cambio real en la administración y cuestionó la utilidad de la simple consulta a la FIFA, en lugar de solicitar una Comisión Normalizadora.
Este giro de los acontecimientos desató una ola de críticas en la opinión pública. El periodista Eddie Fleischman, conocido por sus posturas críticas, señaló que los votos en contra de la intervención de la FIFA provenían de aliados de Lozano, quienes, según él, son “cómplices” de la crisis que atraviesa la FPF.
La crisis interna en la FPF: ¿Qué sigue para la Junta Directiva?
Tras las renuncias, la Junta Directiva de la FPF se encuentra reducida a nueve miembros. Esto plantea interrogantes sobre la estabilidad de la estructura de poder. Según los estatutos de la FPF, si el número de directivos cae por debajo del 50%, se deberá convocar a una Asamblea Extraordinaria para elegir nuevos miembros. Sin embargo, hasta ahora, la Junta parece decidida a mantener su poder, lo que complica aún más la posibilidad de una salida a la crisis.
El abogado Jaime Talledo De Lama, experto en Derecho Deportivo, expresó que ve lejana la posibilidad de que la FIFA instale una Comisión Normalizadora, especialmente si los miembros de la Junta Directiva siguen intentando aferrarse al poder. Según Talledo, solo si la FPF se queda sin quorum o si la Junta solicita formalmente la intervención de la FIFA, podría materializarse un cambio, pero ese escenario aún parece distante.
La propuesta de la Comisión Normalizadora de la FIFA
El llamado a una Comisión Normalizadora, que busca que la FIFA intervenga directamente en la FPF, ha sido uno de los temas más polémicos. Esta comisión estaría formada por un grupo de expertos en gestión deportiva y derecho, que asumirían la dirección temporal de la FPF hasta resolver los problemas estructurales y legales que enfrenta la federación. Su principal función sería restaurar la legalidad, reorganizar la estructura administrativa y asegurarse de que se celebren elecciones transparentes.
En países como Guatemala, Argentina, Uruguay y Venezuela, la FIFA ya ha implementado este tipo de comisiones debido a situaciones de corrupción o crisis internas. En Perú, los opositores a esta intervención señalan que la FPF no está aún en una situación tan crítica como para requerir una medida extrema de este tipo.
Defensa legal de los directivos: ¿quién pagará los costos?
Otro tema que ha saltado a la luz es la solicitud de los miembros de la Junta Directiva para que la FPF se haga cargo de los costos de sus defensas legales en el marco del caso “Los Galácticos”. El presidente de Ayacucho FC y miembro de la Junta, Víctor Bellido, presentó una solicitud formal para que la FPF cubra los honorarios del estudio de abogados que lo representará en las investigaciones. Según fuentes cercanas, el costo de la defensa de cada directivo podría ascender a cifras millonarias, lo que ha generado preocupación en los seguidores del fútbol peruano sobre el uso de los recursos de la federación.
Horacio Zimmermann, periodista deportivo, cuestionó fuertemente el uso de fondos públicos para financiar la defensa de los directivos implicados en el caso, señalando que mientras la FPF enfrenta una crisis estructural, los directivos se están protegiendo con un gasto legal de más de un millón de soles.
¿Cuál es el futuro de la FPF?
El futuro de la Federación Peruana de Fútbol es incierto. Las renuncias, el rechazo a la intervención de la FIFA y las disputas internas entre los directivos auguran un panorama complicado. Mientras tanto, el Ministerio Público sigue su investigación sobre las acusaciones que pesan sobre Lozano y otros miembros de la FPF, lo que podría llevar a más cambios dentro de la federación.
El fútbol peruano necesita urgentemente una solución a esta crisis. La falta de consenso en la Junta Directiva y el rechazo a la intervención de la FIFA dejan en evidencia la polarización interna que amenaza con continuar sumiendo al fútbol peruano en el caos, sin una salida clara a la vista.