En una reciente entrevista, Jefferson Farfán compartió detalles inéditos sobre su trayectoria en el fútbol europeo, específicamente durante su etapa en el Schalke 04. Aunque la ‘Foquita’ gozó de un alto nivel de rendimiento en la Bundesliga, nunca jugó en un club que compitiera por la Champions League, lo que despertó la curiosidad de muchos aficionados. Sin embargo, Farfán reveló que esta decisión no se debió a la falta de oportunidades, sino a una sugerencia clave de su amigo y compatriota, Claudio Pizarro.
Tras finalizar su contrato de cuatro años con el Schalke 04, el delantero peruano recibió varias ofertas de grandes equipos europeos. Sin embargo, fue la propuesta económica de los alemanes lo que inclinó la balanza a su favor. Como recordó Farfán en la entrevista con el exfutbolista Santiago Salazar, el dueño de Schalke 04 le ofreció un contrato renovado con una prima de fichaje considerable, lo que lo dejó en un dilema.
“Estuve cerca de irme a un equipo grande. Tuve ofertas de cuatro clubes de alto nivel, pero el dueño del Schalke 04 me dijo: ‘No te vayas, yo te pago lo que tú quieras'”, expresó Farfán. Ante esta oferta tentadora, el delantero peruano decidió consultar con Claudio Pizarro, quien le ofreció un consejo fundamental.
Pizarro, con su vasta experiencia en el fútbol alemán, no le indicó si debía quedarse o marcharse, pero sí le dejó claro un aspecto crucial: “Ningún equipo te va a pagar lo que te está pagando Schalke”, recordó Farfán. Este consejo fue determinante en la decisión del jugador, quien optó por renovar su contrato con el club alemán por más años.
A pesar de que las ofertas de los otros equipos incluían un salario competitivo, el Schalke 04 le ofreció una prima de fichaje sustancial, que sumada a su salario, hacía que su permanencia en el equipo fuera económicamente atractiva. Esto, junto con su comodidad en el club y el cariño de los aficionados, llevó a Farfán a quedarse en Gelsenkirchen durante siete temporadas, logrando un total de 39 goles en la Bundesliga.
Reflexionando sobre su decisión años después, Farfán aseguró que no fue una mala elección. “Me sentía cómodo, me amaban los hinchas, los entrenadores siempre me apoyaron y el ambiente en el vestuario era increíble”, comentó con nostalgia. Además, recordó su rol como el “chacotero” del equipo, donde, a pesar de su alemán “masticado”, siempre lograba hacer reír a sus compañeros.
A pesar de esta decisión, Farfán también recordó otra ocasión en la que Pizarro le recomendó aceptar una oferta del Bayern de Múnich. “Le dije que con los ojos cerrados fuera, porque en el Bayern iba a ganar títulos y lograr cosas importantes. Sin embargo, la competencia en ese equipo, con jugadores como Ribery y Robben, hizo que Farfán decidiera quedarse en Schalke”.
Este relato no solo destaca la relación de amistad y confianza entre ambos futbolistas peruanos, sino también la importancia de tomar decisiones con base en el consejo de aquellos que han vivido experiencias similares. Farfán, a pesar de no haber jugado en un club de la élite continental, sigue siendo un ícono para los aficionados del Schalke 04 y para la selección peruana.