La Asociación Deportiva de Fútbol Profesional (ADFP) ha solicitado formalmente a la Federación Peruana de Fútbol (FPF) que le sea devuelta la administración y organización del Campeonato de Primera División (Liga 1), tras las graves investigaciones en curso contra Agustín Lozano, presidente de la FPF, y varios miembros de su junta directiva.
En un comunicado emitido este sábado 16 de noviembre, la ADFP argumentó que la situación actual de la FPF, inmersa en investigaciones por presuntos delitos de organización criminal, lavado de activos y fraude, ha desprestigiado la imagen del fútbol peruano. Las autoridades competentes están investigando a Lozano y su equipo por posibles actos delictivos que habrían afectado tanto a la institución como al Estado. Esta situación, según la ADFP, compromete la estabilidad y transparencia de la organización del fútbol profesional en el país.
Antecedentes del Conflicto
La ADFP recordó que en junio de 2018, la FPF asumió la administración temporal del Campeonato Peruano de Primera y Segunda División, a través de un oficio firmado por el entonces presidente de la FPF, Edwin Oviedo. Según el comunicado, la decisión de transferir la organización a la FPF se tomó bajo la premisa de lograr mejoras en la profesionalización, transparencia y fortalecimiento del fútbol peruano, con la intervención de una misión especial de la FIFA. La FPF asumió el control de la Liga 1 en enero de 2019, por un periodo de cuatro años.
Sin embargo, ahora, debido a la grave crisis institucional que atraviesa la FPF por las investigaciones contra Lozano, la ADFP considera que es el momento adecuado para recuperar el control de la liga. “La administración de la Liga 1 debe regresar a la ADFP, ya que somos los legítimos encargados de su organización“, subraya el comunicado.
El Impacto de las Investigaciones en la FPF
En su declaración, la ADFP no solo cuestiona la gestión de la FPF bajo la presidencia de Lozano, sino que también critica la creciente desconfianza que ha generado entre los clubes, ligas y los hinchas. La investigación de la Tercera Fiscalía Supraprovincial Corporativa Especializada contra la Criminalidad Organizada, que incluye a Lozano y otros directivos de la FPF, está centrada en presuntos actos de corrupción vinculados a la administración de recursos y el manejo de la estructura organizacional de la FPF. Esta situación ha afectado la credibilidad y el prestigio del fútbol profesional en Perú.
Experiencia de la ADFP en la Organización del Fútbol Peruano
La ADFP destacó su experiencia en la organización y administración del fútbol profesional en Perú, la cual se extendió hasta el 2018. Según la entidad, durante ese período, se logró un desarrollo óptimo de las actividades del fútbol peruano, con una gestión más cercana a los clubes y un enfoque en el crecimiento del deporte a nivel nacional.
Solicitud Formal y Exigencia de Transparencia
En su carta, la ADFP no solo pide el retorno de la administración del Campeonato de Primera División, sino también que se garantice el “normal desarrollo de las actividades deportivas” mientras se resuelve la controversia legal en torno a la figura de Agustín Lozano y sus colaboradores. La ADFP hace un llamado a la FPF para que, mientras duren las investigaciones, se priorice la estabilidad de la liga y se restablezca la confianza entre los actores del fútbol peruano.
La crisis institucional que vive la FPF ha abierto una nueva página en la relación entre las autoridades del fútbol peruano. Mientras la Fiscalía continúa con las investigaciones, la ADFP busca recuperar el control sobre la organización del fútbol profesional en Perú, con el objetivo de asegurar que la Liga 1 siga funcionando con la profesionalidad y transparencia que, según argumentan, se logró durante su gestión anterior.
Este conflicto podría tener repercusiones significativas no solo en la estructura del fútbol peruano, sino también en la forma en que se gestionan otras competiciones deportivas en el país, por lo que los próximos días serán cruciales para el futuro inmediato del balompié nacional.