“No nos vamos a presentar”: la tajante postura de Alianza Lima tras el arranque de la Liga Nacional de Vóley 2025/26
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Manuel Barreto debutó como DT de la Bicolor con una derrota 2-1 ante Chile, pero se quedó con lo positivo: el carácter del equipo y el estreno de nuevas promesas como Felipe Chávez.
La era de Manuel Barreto al mando de la Selección Peruana comenzó con sensaciones mezcladas: derrota en el marcador, pero ilusión en el ambiente. La Bicolor cayó 2-1 ante Chile en Santiago, en su primer amistoso post Eliminatorias, pero el DT sacó varias conclusiones positivas y dejó en claro que el recambio ya empezó.
Barreto, quien asumió el mando para dirigir los amistosos de fin de año, no escondió su frustración por el resultado, aunque destacó la actitud del grupo. El partido se le escapó a Perú en la última jugada, cuando Matías Lazo, en su intento de rechazar, terminó metiendo el balón en propia puerta.
“Cuando te ganan en la última jugada duele. Duele más porque no lo merecíamos”, confesó el entrenador en conferencia. “Pero me quedo con el orgullo por cómo se han entrenado y por la personalidad que mostraron. Es un equipo con promedio de 24 años, con pocos entrenamientos, y aun así demostraron carácter. Eso me enorgullece como peruano”.
El también jefe de la Unidad Técnica de Menores de la FPF explicó cuál fue la idea que intentó plasmar en el campo. “Buscábamos salir rápido por los costados, aprovechar las transiciones. Claro que amarga el resultado, pero estos chicos dieron un paso grande hacia lo que viene. Tienen hambre, y eso se nota”, señaló.
Barreto se ha convertido en el cuarto entrenador que pasa por la Videna en apenas tres años —después de Juan Reynoso, Jorge Fossati y Óscar Ibáñez—, una muestra clara de que el fútbol peruano necesita estabilidad y nuevos cimientos. Y en ese camino, el técnico tiene claro que el futuro pasa por apostar por las nuevas generaciones.
Una de las caras más esperadas fue Felipe Chávez, el joven volante del Bayern Múnich II, quien hizo su debut con la Bicolor. “Feliz de tenerlo acá”, comentó Barreto sobre el jugador, conocido en Alemania como ‘Pippo’. “Tuvo algunas complicaciones por el viaje y el cambio de horario, pero mostró predisposición y mucha calidad. Lo mismo con Maxloren Castro: si siguen trabajando en sus clubes, van a seguir creciendo acá también”.
El mensaje es claro: la renovación está en marcha. Y Barreto quiere que los más experimentados sean los que guíen a los nuevos talentos. “Araujo, Garcés, Valera, López, Noriega o Santamaría están empujando. Recibieron a los chicos con buena disposición y hay una convivencia muy sana”, destacó el entrenador.
Aunque el marcador no acompañó, el espíritu del equipo sí lo hizo. Perú dejó señales alentadoras en su visita a Santiago: energía, compromiso y ganas de demostrar que hay futuro.
Y si bien la derrota duele, también sirve. Porque a veces los pasos más firmes comienzan en terrenos difíciles. Y Manuel Barreto lo sabe: esta nueva generación ya empezó a escribir su historia con la Bicolor.