La selección peruana se encuentra preparada para un nuevo desafío al enfrentar a Brasil, uno de los equipos más poderosos del continente. Sin embargo, este enfrentamiento trae a la memoria uno de los momentos más gloriosos del fútbol peruano: el único triunfo de Perú sobre Brasil en territorio brasileño, una hazaña que sigue siendo recordada casi cinco décadas después.
El contexto de una gesta histórica
El 30 de septiembre de 1975, durante la semifinal de la Copa América, Perú logró lo impensable: vencer a Brasil en Belo Horizonte por 3-1. Este hito, conocido como el ‘Mineirazo’, representa la única vez que la ‘blanquirroja’ ha logrado superar al ‘scratch’ como visitante, en un partido que marcó un antes y un después para el fútbol peruano.
A pesar de que Brasil era el gran favorito, la selección dirigida por Marcos Calderón, con figuras de renombre como Héctor Chumpitaz, Teófilo Cubillas y Enrique Cassaretto, mostró un fútbol de alto nivel. Este triunfo no solo permitió a Perú avanzar en el torneo, sino que también consolidó a una generación dorada que haría historia.
Un Brasil en transición
Si bien Brasil es reconocido mundialmente por su tradición futbolística, el equipo que enfrentó a Perú en 1975 no contaba con la misma fuerza que aquel que había ganado el Mundial de México 1970. La ‘verdeamarela’ atravesaba un periodo de transición, donde la mayoría de sus jugadores provenían del fútbol local y ya no contaban con estrellas como Pelé. Entre sus figuras destacadas se encontraban jugadores como Nelinho y Piazza, quienes no pudieron frenar el embate peruano.
El técnico brasileño fue duramente criticado por la prensa local tras la derrota, ya que no convocó a los mejores jugadores disponibles. Además, el bajo rendimiento del portero Raúl Plassmann forzó a realizar cambios en el equipo para el partido de vuelta.
Perú aprovecha su oportunidad
El equipo peruano, que había dejado en el camino a Chile y Bolivia, llegó a las semifinales con una generación de jugadores talentosos. Marcos Calderón apostó por un once de lujo, encabezado por el liderazgo defensivo de Héctor Chumpitaz y el talento ofensivo de Teófilo Cubillas y Enrique Cassaretto. Este último fue el héroe del encuentro, anotando dos de los tres goles que sellaron la histórica victoria.
Perú mostró un juego asociativo caracterizado por el popular “toque peruano”, que desarmó a la defensa brasileña. Aquel partido en el Estadio Mineirao será recordado no solo por la calidad futbolística de los jugadores peruanos, sino también por la actitud y el coraje con los que enfrentaron a un gigante del fútbol sudamericano.
Un desenlace emocionante
A pesar de la victoria en Brasil, Perú no pudo mantener su racha en el partido de vuelta jugado en el Estadio Alejandro Villanueva, donde cayó 0-2. Sin embargo, el destino le sonrió a la ‘blanquirroja’, ya que la clasificación a la final se decidió mediante un sorteo, el cual favoreció a los dirigidos por Marcos Calderón.
Perú avanzó a la final, donde se enfrentó a Colombia en una tercera definición disputada en Caracas. Con un gol de Hugo Sotil, la selección peruana se coronó campeona de América por segunda vez en su historia, cerrando así una campaña inolvidable.
¿Podrá Perú repetir la hazaña?
A día de hoy, la selección peruana enfrenta un reto mayúsculo al medirse nuevamente ante Brasil. La diferencia en el valor de mercado entre ambas selecciones es abrumadora: según Transfermarkt, Brasil está valorada en 770,50 millones de euros, mientras que Perú alcanza los 33 millones. No obstante, el fútbol es impredecible, y aunque Brasil es el claro favorito, los resultados recientes del ‘scratch’ han generado dudas.
Este próximo encuentro es una oportunidad para que Perú intente revivir el espíritu de 1975. Si bien la historia parece jugar a favor de Brasil, el recuerdo de aquella épica victoria en Belo Horizonte sigue siendo un motivo de inspiración para la ‘blanquirroja’.