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Escándalo en la Federación Peruana de Natación tras denuncias a su presidente de presentar un título falso.
Rodrigo León Prado es hoy la cabeza de la Federación Deportiva Peruana de Natación (FDPN). En teoría, debería estar impulsando el crecimiento de nuestros nadadores, dándole estructura al alto rendimiento y peleando por el desarrollo de talentos jóvenes. Pero en la práctica, su nombre está más asociado a escándalos que a logros deportivos.
Un video publicado en TikTok por la cuenta @ada.peru encendió las alarmas: León Prado habría presentado un título universitario falso para postular a la presidencia de la federación. Sí, el cargo más alto de la natación nacional podría estar ocupado por alguien que mintió para conseguirlo.
Y no es la primera vez que su gestión genera dudas. Antes ya había ocupado el mismo rol en la Federación Peruana de Triatlón, donde también dejó críticas por su manejo. Hoy muchos se preguntan: ¿cómo llegó nuevamente a una federación importante si hay antecedentes cuestionables?
Esto no es un chisme de pasillo. Es una señal más de que algo está profundamente mal en el sistema deportivo peruano. Mientras nuestros nadadores buscan cómo financiar sus entrenamientos, pagan sus propios viajes y compiten con lo justo, las sillas dirigenciales parecen reservadas para quienes tienen más contactos que méritos.
Sumale a esto las constantes denuncias por abandono de las instalaciones deportivas, cobros ilegales por el uso de espacios públicos, y la sensación general de que el IPD (Instituto Peruano del Deporte) está completamente desconectado de la realidad de los deportistas.
¿Dónde están los filtros? ¿Quién valida los documentos que presentan los postulantes a estos cargos? ¿Acaso no hay una mínima revisión antes de dejar a alguien al mando de una federación nacional?
La comunidad acuática —nadadores, entrenadores, padres, clubes— está cansada. Exige transparencia, renovación y una dirigencia que represente de verdad los valores del deporte. Porque la natación peruana tiene futuro. Lo que necesita es que dejen de nadar en corrupción desde arriba.