Cienciano anunció que Christian Cueva es jugador libre tras no renovarle contrato
Christian Cueva se encuentra nuevamente en el ojo de la Tormenta y Cienciano no le ha renovado contrato por actos extra deportivos.
Carlos Yulo ha generado una gran euforia en Filipinas tras ganar 2 medallas de oro en gimnasia en los Juegos Olímpicos París 2024.
Carlos Edriel Yulo ha hecho historia al convertirse en el segundo atleta y primer hombre en ganar una medalla de oro para Filipinas en los Juegos Olímpicos. Con dos preseas doradas en las pruebas de salto masculino y rutina de suelo en París 2024, Yulo ha desatado una ola de euforia en su país, que se ha volcado en reconocimiento a su extraordinario logro.
El gobierno filipino había prometido una significativa recompensa económica a cualquier atleta que regresara con una medalla de oro, y Yulo no será la excepción. El gimnasta de 24 años recibirá 10 millones de pesos filipinos (aproximadamente 173,300 dólares) como estímulo económico, junto con 6 millones de pesos adicionales (103,000 dólares) por parte de la Cámara de Representantes de Filipinas. Además, será recompensado con una casa de tres dormitorios, completamente amueblada, en el exclusivo vecindario de McKinley Hill en Manila, valorada en 400,000 dólares, cortesía de una empresa de bienes raíces.
Pero los premios no se detienen ahí. Yulo también disfrutará de suministros de comida de por vida, cortesía de una cadena de restaurantes que le ofrecerá macarrones con queso, ramen y pollo a la parrilla de manera ilimitada. También recibirá colonoscopías y consultas médicas gratuitas de por vida, ofrecidas por un gastroenterólogo, y créditos universitarios de la Universidad de Mindanao.
La “Yulomanía” que se ha desatado en Filipinas tras su histórica victoria también ha llevado a otras recompensas más inusuales, como una sesión fotográfica de bodas para el futuro, fundas para teléfonos de por vida, y comida gratis para cualquier persona que se llame Carlos o Edriel, su segundo nombre, en ciertos restaurantes y cafés del país.
Carlos Yulo, quien admitió que no esperaba ganar una medalla y solo buscaba tener un buen desempeño, ha superado todas las expectativas, no solo en el podio olímpico, sino también en el corazón de millones de filipinos que celebran su éxito.
Esta oleada de reconocimiento y apoyo destaca el impacto que sus logros han tenido en la nación, asegurando que su nombre quede grabado en la historia del deporte filipino.