La final de la Copa Libertadores 2025 corre peligro de cambiar de casa. La CONMEBOL está analizando mover el partido más esperado del año fuera de Perú debido a la inestabilidad política que se desató tras la vacancia de la presidenta Dina Boluarte. El país atraviesa días agitados, y eso ya empezó a afectar al fútbol.
El Estadio Monumental, la joya de Universitario de Deportes y una de las canchas más grandes de Sudamérica, fue elegido hace unos meses como sede del gran partido que definirá al nuevo campeón del continente. Pero con el reciente cambio de gobierno y las manifestaciones en las calles, la posibilidad de que Lima pierda la final no suena tan lejana.
Desde la administración de la ‘U’, el directivo Franco Velazco Imparato aseguró que no han recibido ninguna notificación oficial por parte de la CONMEBOL. En teoría, todo sigue su curso normal, con los preparativos avanzando y el estadio alistándose para recibir a más de 80 mil hinchas. Pero la incertidumbre está en el aire, y nadie se atreve a confirmar que la fiesta del fútbol sudamericano se quedará en territorio peruano.
De tomarse una decisión, la primera palabra debería venir de Alejandro Domínguez, presidente de la CONMEBOL, quien tendría que comunicarse directamente con Agustín Lozano, su par de la Federación Peruana de Fútbol. Dentro de la FPF aseguran que harán todo lo posible para mantener la sede en Lima, ya que perderla sería un golpe fuerte no solo para el torneo, sino también para el prestigio del fútbol peruano.
🔙 Un recuerdo que aún está fresco
La situación trae a la memoria lo ocurrido en 2019, cuando Santiago de Chile perdió la final entre Flamengo y River Plate por las protestas sociales que paralizaron al país. En aquella ocasión, Lima tomó la posta de manera urgente y terminó albergando una final inolvidable, con los brasileños levantando el trofeo tras un partido de película.
En ese momento, el gobierno peruano garantizó total seguridad y coordinación para recibir a las hinchadas extranjeras. Todo salió bien, y la organización fue elogiada por la CONMEBOL. Ahora, seis años después, el panorama es muy distinto: el país vuelve a vivir un escenario político inestable y el fútbol se encuentra otra vez en medio de la tormenta.
📅 Lo que viene
Por ahora, la final única de la Libertadores 2025 sigue programada para noviembre en el Estadio Monumental, pero las próximas semanas serán clave. Todo dependerá de cómo evolucione la situación política y de las evaluaciones de seguridad que haga la CONMEBOL. Si el ambiente no mejora, no se descarta que el ente sudamericano busque una sede alterna en otro país de la región.
El fútbol, una vez más, paga los platos rotos de la política. Y aunque los hinchas peruanos sueñan con volver a ver una final continental en casa, la historia podría repetirse: Lima podría ceder el lugar a otra ciudad sudamericana si las cosas siguen igual.