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César Cueto, el “poeta de la zurda” ha sido incluido en el muro de leyendas del Atlético Nacional de Medellín en honor a su magistral trayectoria en el fútbol colombiano.
El Atlético Nacional de Medellín ha rendido un merecido homenaje a César Cueto, conocido como el “Poeta de la Zurda“, incluyéndolo en su prestigioso Muro de las Leyendas. Cueto, quien deslumbró a los aficionados del “verdolaga” con su exquisita habilidad para manejar el balón, se ha consolidado como una figura histórica en el Estadio Atanasio Girardot.
En una ceremonia emotiva, Cueto fue invitado a Medellín para presenciar cómo su figura era inmortalizada junto a otros grandes del club. Vestido de manera sencilla, con una camisa blanca y pantalón negro, el exmediocampista peruano fue recibido por figuras emblemáticas como Reinaldo Rueda, Francisco Maturana, René Higuita, Macnelly Torres, Jhon Jairo Tréllez y Víctor Hugo Aristizábal.
César Cueto, mundialista con la selección peruana en Argentina 1978 y España 1982, fue una pieza clave en el Atlético Nacional durante los años 1979-1983. Con 158 partidos jugados, 39 goles anotados y un título de liga, su legado es indiscutible. Además, fue reconocido como el mejor jugador de la liga en dos ocasiones.
Durante el evento, la presentadora destacó: “Cueto, poesía peruana en máxima expresión. Desde Lima llega un poeta para adornar el fútbol verdolaga y conquistar la gloria de aquel título de 1981.” Estas palabras reflejan el impacto que tuvo Cueto en el club, donde su talento y creatividad lo convirtieron en un ídolo para los hinchas.
El momento más esperado fue cuando Cueto recibió el icónico chaleco verde de manos de Antonio José Ardila, dueño del club. Visiblemente emocionado, Cueto expresó: “Es un verdadero honor. Estoy contento de haber escuchado todo lo que sienten. Mi corazón está agradecido. Doy gracias a Dios por estar aquí en mi casa.”
La relevancia de César Cueto en Atlético Nacional va más allá de los títulos. Su habilidad única para jugar “como los dioses”, según describen en su biografía, lo hizo destacar en cada partido. Sus pases, gambetas y jugadas espectaculares hicieron que asistir al estadio fuera una obligación para los aficionados del fútbol.
En su discurso, Cueto recordó los desafíos que enfrentó al adaptarse al fútbol colombiano: “Me acuerdo de tantas cosas y me animaba a contar una anécdota de cuando llegaba de Perú. Allá se jugaba más alegremente, acá era súper diferente, el entrenamiento era durísimo para mí.” A pesar de las dificultades, su dedicación y talento lo llevaron a convertirse en una leyenda.
César Cueto, con su magia y elegancia en el campo, seguirá siendo una inspiración para futuras generaciones. Su inclusión en el Muro de las Leyendas del Atlético Nacional es un testimonio de su grandeza y de cómo su “poesía” en el fútbol dejó una huella imborrable en la historia del club.