Perú 3-1 Bolivia: las ‘matadorcitas’ arrancan con todo su camino en los Juegos Bolivarianos 2025 voley peruano

La Selección Peruana Sub-19 de vóley abrió su participación en los Juegos Bolivarianos 2025 con una actuación que tuvo de todo: nervios, errores, recuperación y una remontada que dejó al público metido de principio a fin. El equipo de Antonio Rizola se impuso 3-1 ante Bolivia, sacando adelante un debut que parecía complicarse luego de caer en el primer set (23-25), pero que terminó con parciales sólidos de 25-16, 25-18 y 25-15.

El arranque fue áspero. El sexteto nacional salió algo desconectado y el cuadro boliviano aprovechó cada detalle para llevarse el primer parcial. Entre dudas en la recepción y un bloqueo que no terminaba de cerrar, el 23-25 cayó como un baldazo. ¿Lo positivo? Ese golpe despertó al equipo.

Desde el segundo set, Perú se metió de lleno en el partido. El saque empezó a pesar, la defensa se ordenó y el ataque encontró ritmo. Ariana Vásquez, que venía apuntando manera desde el calentamiento, metió tres servicios directos que cambiaron el pulso del juego. De ahí en adelante, el equipo encontró su identidad: presión constante, ataque por las puntas y un bloqueo que empezó a frenar a las atacantes bolivianas.

En el tercer parcial llegó el mejor tramo de las dirigidas por Rizola. Gianella Chanca, la máxima anotadora del encuentro con 18 puntos, sostuvo el envión del equipo entre mates potentes y puntos en momentos clave. Hubo una jugada que levantó a todo el Dibós: un bloqueo de Palomino que puso el 16-15 y terminó inclinando el parcial a favor peruano.

El cuarto set fue una demostración del nivel que puede alcanzar esta categoría cuando juega suelta. Arranque de 4-0, dominio en la net con Brenda Quiroz y un cierre sin sobresaltos gracias al saque presionado y un bloqueo que cerró cada hueco. El 25-15 final reflejó la diferencia que Perú marcó cuando ajustó su juego.

A lo largo del duelo, el marcador minuto a minuto dejó momentos intensos: desde los aciertos que levantaban al equipo hasta las fallas que obligaron a Rizola a pedir tiempo para ordenar ideas. Cada punto fue parte de una historia que terminó con la ‘bicolor’ celebrando con el público.

Detrás de este debut hay un proceso largo. El equipo viene entrenando varios meses, disputó el Atenea Open —donde no logró sumar victorias, pero sí ritmo— y jugó amistosos locales para definir su lista final. No estuvo exenta de problemas: bajas importantes como la de Waleska Toro, la capitana, y jugadoras que quedaron fuera por temas académicos. Aun así, Rizola insiste en que el objetivo es claro: pelear por el podio.

El próximo reto será Colombia, un rival duro, más físico y con roce competitivo. Será la primera gran prueba para medir la consistencia del equipo. Si Perú juega como en los últimos tres sets ante Bolivia, hay razones para creer.